A finales de siglo XIX y a principios de siglo XX, era tradicional en Inglaterra servir el Lemon Curd con pan o scones para acompañar el té, como alternativa a la mermelada.
No había hecho nunca y su sabor es fantástico, la hice para rellenar unas magdalenas y a partir de ahora, seguro que no falta en casa.
Ingredientes
4 yemas de huevo (grandes)
125gr de azúcar
93ml de zumo de limón recién exprimido
56gr de mantequilla en pomada
una pizca de sal
2 cdtas de ralladura de limón
Preparación
En una olla anti-adherente, batir las yemas y el azúcar hasta que esté bien mezclado. Añadir los demás ingredientes menos la ralladura de limón. Cocinar a medio fuego, removiendo constantemente, hasta que se convierta en una salsa espesa. La mezcla cambiará de translúcida a opaca. No conviene que hierva porque se cuajará.
Cuando haya espesado, retirar del fuego y poner en un bol. Añadir la ralladura de limón y remover. Dejar enfriar. A medida que se enfríe se irá cuajando. Receta para un bol.
Se puede guardar en la nevera hasta 3 semanas, en un bote hermético, aunque su sabor disminuye con el paso de los días.
La he cogido del blog "Technicolor Kitchen". Espero que os guste.
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