En primer lugar, deciros que este verano intentaré publicar todas las ensaladas que vaya haciendo para que podais coger ideas para hacerlas en casa. La primera de ellas es una "Ensalada fresca de quinoa". Encontrareis seguidamente, una descripción de la quinoa, ya que seguro que muchos de vosotros no la conoceis, incluída yo, que hace poco la descubrí. Después, viene la receta que espero que por lo menos probeis.
El cultivo de la quinoa se inició hace al menos tres milenios, posiblemente en el entorno del lago Titicaca, y fue el alimento básico de los incas hasta la llegada de los conquistadores españoles que sustituyeron su cultivo por el de maíz, cebada, trigo, avena o patatas. Sus crujientes granos, de color amarillo claro, poseen un sabor delicado a medio camino entre el arroz y el cuscús, y tienen la virtud de no cansar el paladar ni de «limpiarlo» de otros sabores más intensos. Una vez hechos, quedan sueltos, brillantes, y su germen en espiral les otorga una presencia original que da mucha personalidad a las recetas.
Lo más destacable de la quinoa, en comparación con
los cereales tradicionales, es la elevada cantidad de proteínas (un 13% del
peso, casi el doble que el arroz) con unas proporciones de aminoácidos
esenciales que favorecen su asimilación.
Los hidratos de carbono representan
el 69% del peso de la quinoa. Por
tanto, es una fuente óptima de energía que se libera en el organismo lentamente
porque va acompañada de una buena dosis de fibra dietética (6 g de cada 100).
Esta fibra, por su parte, favorece la circulación intestinal, regula los niveles
de colesterol, desarrolla la flora bacteriana positiva y previene el cáncer de
colon.
Además es rica en minerales esenciales, sobre todo hierro: una ración
de 60 g aporta el 46% de las necesidades diarias del hombre y el 31% de las de
la mujer (aunque su asimilación depende en parte de la presencia de otros
nutrientes en la dieta), magnesio (el 36%), fósforo (31%), manganeso (27%), cinc
(13%), cobre (12%) y potasio (11%). Esta fórmula, superior a la del arroz, la
avena o el trigo, hace de la quinoa un alimento excepcional para la
mineralización del organismo y especialmente beneficioso para los sistemas
músculo-esquelético, nervioso e inmunitario.
Sus vitaminas refuerzan los
efectos positivos, pues el ácido fólico (60 g cubren el 15% de las necesidades
diarias), la vitamina B2 (el 13%) y la B3 (el 9%) son imprescindibles tanto para
la salud del sistema nervioso como para estimular las defensas frente a la
enfermedad. Además no contiene gluten y se digiere bien.
Fuente: Cuerpo y Mente
Ingredientes
6-8 puñaditos de quinoa
2 tomates maduros
1 pimiento verde pequeño
1/2 cebolla
Sal y aceite de oliva virgen
Elaboración
Poner a hervir la quinoa en un cazo con agua hirviendo. Estará cocida en unos 18-20min, más o menos como el arroz. Colar y enfriar.
Mientras, cortar a daditos los demás ingredientes, el tomate, el pimiento y la cebolla.
Poner todo en un bol y condimentar con sal y aceite.
Espero que os guste, ya que es una forma muy sana de comer una rica ensalada.
Para 4 personas.
Una auténtica delicia Natalia!! Te ha quedado de escandalo tanto la ensalada como las fotos.
ResponderEliminarYa te echaba de menos.
Besos!!
QUE RICA ENSALADA.DELICIOSA.BESOS
ResponderEliminarQue buena ensalada. Yo probe la quinoa el año pasado por primera vez y nos gusto muchisimo
ResponderEliminarUn beso
SI SEÑORA, UNA DELICIA DE ENSALADA SANA Y MUY REFRESCANTE!!!!!
ResponderEliminarBESITOS,